sábado, 31 de octubre de 2009

¿Dónde quedó la muerte?


La muerte no llegó
Y a nadie se llevó
El moribundo solitario preguntó
¿Hasta ésta me abandonó?

¡En dónde la muerte se ha metido!
La muerte nos ha mentido
El cardenal ha dicho
Y el temor a un viejito hizo bicho

Los chavales festejaron
Pues nunca al otro lado irían
Con felicidad todos se atragantaron
Ahora eternamente vivirían

Y pasaron los días
¿Fría muerte dónde estarías?

Ya el suicida viviente
Conserva el gaznate infecundo
Aunque se aviente
Del puente moribundo

Los decapitados para poder saludar
Pasaban la cabeza a la otra mano
Los que debían morir se acumularon
Y los que esperaban su herencia chillaron

Con tanto vivo-muerto
El vivo se encabritó
¿Dónde estás maldita calaca?
Llévate este hedor que achaca

El valor de la muerte por fin entendimos
Aunque ésta no reparó en la lección
Con resignación nos desentendimos
La huesuda ya era sólo ficción

Pero un día abrió los ojos la muerte
Tantos muertos que tenía en mente
¡Qué resaca tan culera!
Chale, nomás eso era

jueves, 22 de octubre de 2009

Dos tres o masomenos


Se abre la puerta sensible al contador personalizado y automatizado del cuello. Mamá sonríe pues ve entrar a Yorchsito.
-Hola mi vida (en su cuello el contador marca dos de dos, una de una). ¿Cómo te fue en la escuela? (marca una de tres, una de dos y cuatro de una)
-Dos-tres (contesta el chilpayatito del futuro).
- ¿Hiciste mucho ejercicio? (marca: una de cuatro, una de tres y una de dos).
-Mas-o-me-nos
-¿Te portaste bien? (una de tres, dos de una)
-Dos tres
-¿Te dejaron tarea? (dos de tres y una de una)
-Mas-o-me-nos
-¿Pero qué demonios te enseñan en la escuela? (Pregunta la madre alarmada, el contador marca cuatro de tres [el contador registra las palabras relacionadas con Satanas o groserías como dobles], una de dos y cuatro de una).
-Pues hoy me ensañaron que las palabras que el contador de nuestro cuello no nos cobra por usar son dos-tres y mas-o-menos. Y en la clase de alemán me enseñaron la palabra más larga registrada en el libro de los record guinness: Donaudampfschifffahrtselektrizitätenhauptbetriebswerkbauunterbeamtengesellschaft. Que significa sociedad de funcionarios subordinados de la construcción de la fábrica principal de la electricidad para la navegación de barcos de vapor en el Danubio. Jijiji (el contador del niño empieza a funcionar, se calienta con rapidez y se detiene sin poder seguir marcando más).

Créalo o no, la palabra existe.

miércoles, 14 de octubre de 2009

A la luz de una alcantarilla

Pura niebla o demasiada luz
Pura muerte o demasiada pasión
Puro pulque o jodida cocacola
Salmodias oficinescas o fajas berlinesas


La luz del sol sorprende a los puerquitos
Papi ya no es lo que era, ni siquiera las cenizas
Mami huele a pulque, papi a cemento
Así nací, a la luz de una alcantarilla

El pinche oficinista rata

Abres los ojos y el sol te deslumbra. Las cobijas apestan y al lado duermen tres personas con sexo polimorfo. Frente a ti sólo ves tacones y zapatos boleados que desfilan al ritmo de una danza febril, la de correr al trabajo. Inagotables trajes gris de rata, del mismo color que el cielo, del mismo que el cemento.


La jornada comienza. ¿Qué harás hoy? Buscas en la bolsita que está al lado de tu genital y encuentras dos monedas, una de dos pesos y una de cinco. Con la más chica obtienes un tabaco, con la grande un par de tacos. Te rascas las ladillas. Te sientas sobre los meados. Sonríes.

Se despierta el Quepo y el Loco.

-Dame tu cigarro, culero (te lo arrebata el Quepo. Loco nunca habla, sólo afirma o niega).

-Chinga tu madre puto (contestas)

-¿Tons qué? Pinches tiesos. Vamos a atracar la farmacia (el Loco afirma).

-No se wey, tengo un mal presentimiento.

- Pinche chamaco caguengue y putín.

- Ni madres wey, mejor vamos a atracar a una ruquita en el parque.

-Pinches rucas aguadas nunca tienen varo. Apenas te alcanza pa unas monas chidas. Se me antojan unas piedras ojete, vamos a la farmacia.

-No quiero

-Mcht, pinche pendejo. Cuando nos veas aquí dándonos unas piedrotas y estés babeando no te vamos a dar ni madres. Abrígate culero (te dan una patada en la panza).



El Loco y el Quepo despiertan a Putita Perita. Le dicen “ámonos Putita, amos a atracar la farmacia”. Se levanta., Se sube el calzón que tenía medio abajo, medio sucio y medio mequeado.



Te paseas enfrente de la farmacia para ver el atraco. Entonces entran los tres malandrines. Se meten de un brinco tras el mostrador. Le dan un madrazo al gordito pusilánime con bata y una nalgada a la guapa vendedora. Putita toma el dinero de la caja. Salen corriendo y cruzan la calle. Un oficinista con su traje gris corre para detenerlos. Cruza la calle y choca contigo. “Lo atrape, lo atrape”.



Llega la patrulla y gritas “yo no fui”, desesperado, una y otra vez. Te llevan a la correccional ya que el oficinista gris se ofreció como testigo.



En la correccional te recibe un tipo fofo:



-A ver mosquita, te explico como funciona. El trabajo ayuda a no estar pensando barbaries. A las cinco de la mañana se despiertan para trabajar en la maquila. Luego comen de 12 a 12:15. Regresan a la maquila. De 7 a 7:15 cenan y a su celda. ¿Entendiste mosquita?



Al día siguiente te despiertas según lo planeado. Llegas a la maquila y te encuentras con kilómetros de tela gris. El centanar de máquinas hace un sumbido de mosca. Cojes la tela y empiezas a confeccionar un elegante disfraz de rata.

martes, 6 de octubre de 2009

Lapizerdos

¡Ya me cayó el chahuiztle! No encuentro en este inmenso cajón un jodido lápiz con goma. Encuentro unos cortos, otros largos, alguno mordido, ninguno con goma. Busqué donde las plumas son colocadas y hallé uno sin goma. ¿De qué sirve un lápiz sin goma?



Entonces busqué algún lápiz con goma que hubiera visto por ahí. Ni uno. ¿De verdad existe tal cosa? Comencé a recordar que este cajón siempre tiene lápices sin goma. Caigo en cuenta que mis pensamientos son absurdos. En las papelerías se desbordan los lápices inmaculados. Comprar uno y patatín patatán.



Y llego a la papelería y pido un par de lápices. El tendero pregunta:

-¿Lápices?

- Si (contesto nervioso), si, con goma, dos.

-¿Con goma?

-Sssí

-Se acabaron

- ¿Cómo?

- Los descontinuaron, ahora sólo tenemos lapizerdos. Son óptimos para las pantallas de plasma sensibles al tacto. Las hojas de papel ya sólo se hacen artesanalmente para los pocos pintores rústicos. ¿Que no está en contacto con la realidad amigo, en que siglo vive?



Entonces volteo y me percato de lo largo de la barba canosa. Por fin veo lo anticuado de mi ropa. Veo que todo es digital. ¿Dónde he estado estos últimos 20 años? Regreso al hogar. El hogar de siempre entre torres digitales cromadas. Veo mi Pentium 3 y suspiro. Busco en la red: 3:06 p.m., 6 de octubre 2035. Busco información sobre los lápices. El primer y el último lápiz me interesaban sobre todo. Debemos los lápices a Josef Hardtmuth (20 de febrero de 1752, Austria). Perdón, debíamos. Del último lápiz no se sabe nada.



Me encontré con que el lápiz más caro del mundo fue realizado en el 2001 al conmemorar el 240 aniversario de la compañía Graf von Faber –Castell. Costaba en ese entonces 9 000 euros. Su valor aumentó con el deseo posesivo de los coleccionistas. Se hicieron sólo 1761 unidades. Número que corresponde al año en que se creó la marca. El lápiz se realizó con madera de olivo de 240 años, en oro blanco y con tres diamantes en la tapa. Todo esto absurdo pero cierto en tu realidad. Incluye sacapuntas y un bonito estuche.



En fin. Ya sin goma para borrar lo que estaba escribiendo, tuve que comenzar a escribir en mi Pentium 3. Mis ojos no estaban acostumbrados y lloran. ¡Cuántos años con la Pentium guardada! Con los ojos cristalinos escribo: “Antes los lápices inspiraban metáforas, algo literario. Recuerdo que Borges nos habla de un lugar donde, sí uno pierde un lápiz, avisa a otro para que le ayude a buscar, luego encuentra el lápiz y no le dice al otro que sigue buscando, entonces el otro puede encontrar dicho lápiz. Resultando así dos lápices idénticos. Esa es la lógica…

“Ahora los lápices sólo pueden encontrarse como chácharas antiguas. Malditos lapizerdos (una lágrima escurre suavemente por mi mejilla). ¡Qué me importan los diamantes! Sí tan sólo este lápiz tuviera goma…”

sábado, 3 de octubre de 2009

Vo-cabulario

Antes arrastrábamos algún asqueroso asno activando al artefacto anal


Buena baba burril, buen balbuceo, buen burro, ¡buzo burro!

Con cálida cogida comieron coño, caño y cola

Dedos dioicos disidentes de dunas desertificadas de danzas dimensionales

Espurio éste. Estacas estáticas, estética estopa. Erotismo esto

Firmamos, fue, fuera forzado. Fueron fórceps fálicamente forzados

Giramos gimiendo. Gemimos gestando gimnasia gusánica. Gemido guasón.

He hilado hepáticamente. Has honrado hipos. Hemos herido heraldos himénicos

Ibas imaginando imitar imantaciones incestuosas

Jugaron jalones. Jodimos jadeantes. Jaleas jocosas justificadas

Koala Kamikaze Kalimanesco

Luego los listones liaron líos lisos. Leíste libros labiales. Luciérnagas libidinosas lisérgicas lesbianizaron

Mamamos mimosamente mil mieles magnéticamente menstruadas moliendo mares mangosos

Ni nada ni nadie nadó ninfa nocturna. Negligencia

Ñiño ñoño ñoñizando ñeros. Ña

Orificios omitidos, oscuros ostentos. Orgasmos, orgasmea, orgasmisista

Putos puteros puteados. Puertas partidas por pendejos paridos pardos

Quien quiera que queme quetamina quemará querubines químicamente quistéricos

Roíste rivereñamente risas rojizas. Río rutas rastosas

Saliste somnolienta. Surgiste sorgo. Sorbiste sexos

Temiste tirate toda. Te tuve tentáculo torpe. Tocimos

Urgencias, urgente, urgidas universalmente urgadas

Vi volcanes verdosos vitrinados. Viscisitudes varias. ¡Va!

Wachando, wileando, wawareando, weyeando

Xochimilca xerolíficamente xicotito

Yo yoyo

ZZZZZZZZZZZZzzzzzzzzzzz