lunes, 26 de julio de 2010

Fragmentos playeros



I

Remolinos y caracoles que escurren en lo calcáreo

Patrones pétreos que desfilan entre olas lejanas

Camellones camaleónicos entre cielos perdidos

El piso estrellado


II

El pitillo armadillo

Los jinetes de la bonga cabalgando entre dunas de humo

Un paso, un trago
Un sorbo, un pozo
Un cambio, dos baros

Cementerio de arena
Tres o cuatro intentos de bacha desvielada, doce envases de caguama y cuatro cajetillas de cigarros vacías


III

Casos caninos:
pulgas que andan
mordidas volcánicas
sangre encostrada

Nel. No había una vez un niño que no andaba por la playa buscando seres extraños mientras no vendía pescadillas y sopes. No encontró alguno que le ofreciera una bebida y un tanto de humo. Él no la bebió y no fumó. De ninguna forma acabó su día tóxico hasta las manitas


IV

Plantón de plancton
Babas vacías llenas de besos 
Hay cántaros sin agua


V                                                                            

Al regreso los encuentros felinos
 Deslizándonos como gatos nos vamos arañando

3 comentarios:

  1. Ai weeeeei ora sí me sorprendiste carnal... te estas rifando mucho, "hermosas imagenes, mucha fuerza" :P no no ya enserio, me gusto un chingo este poema en honor a la banda Chacahuabonguera. Sígue escribiendo.

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  2. Para que nunca muera la chacahuabonga!!!

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  3. anonadada

    sobra decir que me encanta

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