lunes, 17 de mayo de 2010
Polvo
Una piedrita es pateada. Luego otra piedrita es arrastrada por la lluvia. Después se encuentran, chocan y se contemplan serenas. Pasa un mes y siguen ahí. Un niño patea una de las piedritas separándolas eternamente. La piedrita remanente permanece un rato sorprendida. No sabe que será triturada por el bastón de un anciano, tampoco que la lluvia se llevará el polvo.
sábado, 15 de mayo de 2010
Tan sólo
Abrir los ojos
seducir el instante
Volverse avalancha entre tintas de piel
Volverse murmullo entre dunas de hueso
Cerrar los labios
lamer el silencio
seducir el instante
Volverse avalancha entre tintas de piel
Volverse murmullo entre dunas de hueso
Cerrar los labios
lamer el silencio
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